Luego los niños crecen y se dan cuanta que soñar es lo único que les queda, pero han perdido el sueño y sólo pueden llegar a él con pastillas para dormir. Una triste historia que se desprende de tan simple viñeta.
La viñeta también tiene una lectura sencilla y positiva. Al niño eso de dormir le parece una pérdida de tiempo: hay tantos juguetes, tantos amigos y tanto mundo por disfrutar... No recuerdo quién dijo eso de que «dormir está sobrevalorado». Seguro que fue un adulto insomne. Noctámbulos saludos.
Bueno, tal vez soñar...
ResponderEliminarUn beso.
Los niños (y algunos adultos) prefieren, a veces, soñar despiertos. Un beso, Amapola.
EliminarLos niños no quieren dormirse y los adultos no pueden.
ResponderEliminarPor eso muchos adultos buscan recuperar al niño que fueron: para dormir como benditos. Saludos.
EliminarLuego los niños crecen y se dan cuanta que soñar es lo único que les queda, pero han perdido el sueño y sólo pueden llegar a él con pastillas para dormir. Una triste historia que se desprende de tan simple viñeta.
ResponderEliminarSuerte para dormir ésta noche.
J.
La viñeta también tiene una lectura sencilla y positiva. Al niño eso de dormir le parece una pérdida de tiempo: hay tantos juguetes, tantos amigos y tanto mundo por disfrutar... No recuerdo quién dijo eso de que «dormir está sobrevalorado». Seguro que fue un adulto insomne. Noctámbulos saludos.
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